Nuestra historia
Anchoas DobleuVe nace de la tradición familiar marinera, toda una vida dedicados a la pesca y la conserva en Santoña. Después de muchos años trabajando en diversas conserveras, nos decidimos a dar el paso de fabricar nuestro propio producto, con la idea de mantener la elaboración tradicional procesando nuestra anchoa del Cantábrico, y así, transmitiros a través de ellas el amor, el esfuerzo y la dedicación con los que lo realizamos.

Nuestras anchoas nacen en el mar Cantábrico, siendo capturadas en la costera de primavera, entre los meses de abril y mayo, cuando vienen a desovar a la costa. Una vez posadas en sus camas de sal, descansan, esperando su madurez al abrigo de los montes de Argoños, la brisa y la humedad del parque natural de las marismas de Santoña, Victoria y Joyel, alcanzando así la excelencia en su sabor.













En nuestro pequeño obrador realizamos una producción muy limitada, ya que se soban una a una para retirar la piel, se lavan y secan, para, tras un minucioso proceso manual de limpieza, enlatarlas y cubrirlas con aceite para conservar su sabor único. La combinación de métodos tradicionales y la excelencia de materias primas que nos proporciona el Mar Cantábrico hacen de las Anchoas DobleuVe un manjar.
La originalidad consiste en el retorno al origen; así pues, original es aquello que vuelve a la simplicidad de las primeras soluciones.
Antonio Gaudí

· Sabor a tradición ·